A todos los que nos ha tocado coexistir esta última era, hemos contado con la posibilidad de vivir una cotidianidad completamente distinta a la de antiguas generaciones gracias a la participación que ha logrado alcanzar la tecnología en cada espacio que conforma nuestra habitualidad. No solo se trata de los procesos informáticos aplicados a los oficios y labores de trabajo, sino el uso de Internet a casi cualquier cosa que hagamos diariamente.
Es así como surge lo que se conoce como el Internet de las cosas, o lo que comúnmente se conoce como Iot por su abrevación en ingles Internet of Things, y que en español sería Idc, y que no es otra cosa que la conexión que existe en red de artefactos o dispositivos acoplados y los cuales son capaces de recopilar e intercambiar datos recurriendo a sensores. Es así como se puede vincular a Internet dispositivos de uso común hoy día como los móviles, impresoras, Smart TV, cámaras vía IP, GPS y otros tantos aparatos electrónicos bajo un mismo sistema de enramado sistemáticamente.
Ahora bien, ¿Quiénes hacen posibles que estos mecanismos sean capaces de conectarse a Internet de forma remota y así cualquier persona pueda acceder a la vigilancia y/o dirección constante de sus equipos sin importar el lugar donde se encuentre hacia algún dispositivo o artefacto? No son otros que los fabricantes de dispositivos IoT
Ellos, han desarrollado varios sistemas de dispositivos interconectados con una batería de larga duración, alta velocidad de funcionamiento y actividad de alto nivel. Todo esto se maneja bajo un método conocido como: el Internet de las cosas de banda estrecha (NB-IoT) convirtiéndose en la manera más popular en la cual los dispositivos iot funcionan de manera prolija.
Sensores Iot ¿Qué son?
Pero, además estas empresas son fabricantes de sensores IoT los cuales son básicamente, componentes conformados por un transductor, que detecta, mide e indica los cambios generados en una magnitud física específica como la temperatura, la humedad, la presión, entre otras, pero con la capacidad de transformarlos en una señal eléctrica, acompañado por un acondicionador de señal, que extiende esa modificación y lo convierte en un formato sencillo de leer.
Pero dichos sensores no sirven de nada si no están formando parte de un nodo, que es un sistema electrónico en el que diversos componentes como controladores, fuentes de alimentación, módulos de memoria, etc. se interconectan con el fin de recopilar la información, procesarla y enviarla a través de una red.
Por supuesto existen diversos tipos de sensores según su función, pero, en resumen, su trabajo está enmarcado en las aplicaciones que contribuyen a ser un mecanismo que facilita la vida. Por ejemplo, entre los muchos sensores Iot que existen podemos mencionar los siguientes:
- Temperatura
- Proximidad
- Medición
- Presión
- Humedad
- Nivel